Singapur y la tercera reforma educativa
Alex Castillo, director de Marshall Cavendish para América Latina, dijo que Singapur siempre ha puesto la educación al servicio de un propósito como país.
¿Cómo surgió el método Singapur?
Surge como una respuesta a un desafío de país hace 50 años atrás, de construirse o convertirse en un país moderno. (…) El único recurso natural con el que pueden contar es con las personas y, por lo tanto, hay que invertir en ella. Posicionan a la educación como su moneda de cambio. Y comienza una búsqueda de un nivel educacional mayor para responder a una necesidad que en ese momento era prestar servicios. Se dan cuenta que la única posibilidad de desarrollo era que se convirtiera en un puerto importante de paso y que ese puerto necesitaba de gente preparada que pudiera dar un buen servicio, que se pudiera cobrar y crecer.
¿Cómo lo hacen?
Buscan y conocen las diferentes teorías de aprendizajes que había en el mundo. Así conocen a (Jean) Piaget y (Hebert) Blumer. Toman lo que consideran que es más apropiado y lo sistematizan para ser entregado en sus escuelas. Deciden que el idioma oficial del país va a ser el inglés. Entonces buscan a las personas que tengan alguna preparación en inglés y le entregan la labor de educar.
¿Y el método les da resultado?
Sí. Logran un país de habla inglesa y que el puerto sea uno de los más importantes del mundo. En el año 80´ deciden crear otra revolución educativa y generar una reforma para insertarse en el mundo de la ciencia y de la matemática.
¿Por qué?
Deciden que el país tiene que estar preparado para ser una fuente de negocios. Ya que sabían inglés estaban recibiendo muchas oportunidades; por eso consideran esencial el desarrollo de la ciencias y de la matemática y empiezan a trabajar en la sistematización de un proceso que apoye a los profesores en la enseñanza de estas áreas.
¿Siempre se ponen una meta a alcanzar?
Sí. Es una característica de Singapur: siempre ha puesto la educación al servicio de su propósito como país. Desde los años 80´ ha llevado a cabo un proceso que en los últimos diez años le permitió colocarse en el primer lugar en ciencia en las pruebas internacionales (Pisa, Tims y Pirls). Y en primer, segundo y tercer lugar en matemática y en lengua.
¿Qué nueva meta se propone alcanzar hoy el país?
Hoy está buscando un nuevo objetivo que es lo que el mundo necesita para los próximos 30 años: técnicos profesionales. Y quieren prepararse para ser los mejores. En eso están.
Fuente: El Observador de Montevideo.